El secretario de Gobierno Distrital reportó que los fuertes cambios de clima que ha experimentado la ciudad estas semanas han enviado a por lo menos 26 niños de comunidades indígenas al hospital en el último mes y medio

El secretario de Gobierno de Bogotá, Luis Ernesto Gómez, volvió a referirse este jueves 11 de noviembre a la situación que se vive en el Parque Nacional de la capital, que cumple casi dos meses ocupado de manera ilegal por indígenas del pueblo embera. Según el funcionario, estos últimos están poniendo en riesgo la salud de 290 niños y niñas.
Según dijo, de tal cantidad de menores de edad, al menos 26 han tenido que ser trasladados a centros hospitalarios por problemas de salud, incluyendo cuatro que permanecen internados en este momento junto a otros dos adultos pertenecientes a esta comunidad ancestral.

En ese sentido, Gómez señaló que el distrito está insistiendo en su oferta de trasladar a los indígenas hacia la Unidad de Protección Integral del Parque la Florida, donde al igual que 1.050 indígenas que ya están allí, contarán un albergue transitorio con mejores condiciones y a acceso a atención en salud, escolarización a los niños, niñas y adolescentes, alimentación y alojamiento .
Valga señalar, entonces, que las mismas acampan en el parque desde finales de septiembre pasado en señal de protesta por la falta de garantías que han experimentado históricamente, y por el cese de programas de ayuda que les generaban sustento en Bogotá. También, se han negado a ir a dicho albergue esgrimiendo argumentos como la mala infraestructura de estos, riñas con otras etnias y hacinamiento.
De ahí que las autoridades locales resolvieran ofrecer, también, la adecuación de una bodega de la ERU – Empresa de Renovación y Desarrollo Urbano, ubicada en la localidad de Santa Fe, propuesta que fue rechazada, agudizando la precaria situación.
En un pronunciamiento difundido por la alcaldía, se lee que, “decenas de familias Emberá insisten en seguir ocupando el Parque Nacional arriesgando su salud y la de sus niños y niñas, a pesar de las ofertas de traslado por parte del Distrito a lugares dignos, seguros y con todas las condiciones de salubridad y escolarización para los menores; mientras la Unidad de Víctimas del Gobierno Nacional hace su proceso de reubicación o retorno a sus lugares de origen”.